lunes, 10 de diciembre de 2012

EL DÍA DESPUÉS Y EL DÍA DE AYER

Este ha sido un mes lleno de acontecimientos en lo referente al conflicto palestino-israelí. La lluvia de misiles y cohetes lanzados desde Gaza contra la población civil israelí desencadenó la Operación Pilar de Defensa y, con la denominada "histórica votación", la Asamblea General aceptó a la Autoridad Palestina como Estado No Miembro en la ONU.

Sin embargo, echando la mirada atrás, hasta hace más o menos un mes y, comparando la situación con la actual, podemos decir sin temor a equivocarnos que el día después se parece demasiado al de ayer. Y es que, a pesar de todos estos acontecimientos, estamos prácticamente en el mismo lugar.

Por un lado, la situación en Gaza no ha cambiado drásticamente. La amenaza de los cohetes y misiles sigue planeando sobre los ciudadanos de Israel. Y los líderes terroristas de Hamás, que consideran que la muerte de más de 150 palestinos es una gran victoria para ellos, siguen manteniendo con el apoyo de Irán su política de contrabando de armas hacia la Franja de Gaza.

El cese el fuego basado en la fórmula de tranquilidad por tranquilidad (si los terroristas de Hamás no disparan a la población civil israelí, entonces Israel no responderá a los terroristas) no supone ninguna novedad, ya que ésta fue justamente la intención de la retirada israelí de Gaza de hace ya más de 7 años.

Además, la llamativa visita a la Franja de Gaza de Jaled Meshal y su discurso de odio evidenciaron muy claramente que Hamás no va a aceptar durante mucho tiempo este tipo de estabilidad y que la presión de Irán no permitirá que haya tranquilidad para el sur de Israel, así como tampoco para la población de Gaza.

Por otro lado, ahora Abu Mazen ha conseguido su investidura de jefe de estado (No Miembro, Observador), título del que parece que se enamoró y, como tal, sigue "observando" lo que sucede en la Franja de Gaza sin la más mínima capacidad de influir en la zona.

El silencio de Abu Mazen en lo relativo a los discursos belicistas de los terroristas de Hamás enfatiza su limitadísima relevancia en una parte del territorio que el mundo considera como parte de su Estado. Sin embargo, el asunto no termina aquí. Aquellos ingenuos que creyeron las palabras de Abu Mazen cuando prometía regresar a la mesa de negociaciones sin precondición alguna tras la votación en la ONU, hoy deben sentirse muy decepcionados ya que en su primer discurso en Ramala aclaró a los escasos palestinos que estaban de celebración en las calles, que no renuncia a ninguna precondición a la hora de retomar a las negociaciones con Israel.

Nuevamente nos encontramos en el mismo punto en el que ya estábamos. Y aquellos que creían que habría una gran diferencia puesto que ahora Abu Mazen es jefe de estado, deberían preguntar a los ciudadanos de la Autoridad Palestina si su realidad ha cambiado en algo gracias a la concesión del nuevo título.

Podría terminar este post con la sensación de desesperanza pero, estamos en época de fiestas con la llegada de Janucá, así que os merecéis que hable de un milagro, aunque sea pequeñito: el periódico El País en su editorial de este domingo día 9, por primera vez ha calificado a Hamás como terrorista. Teniendo en cuenta que han transcurrido 25 años desde la creación de esta banda terrorista, ¡Eso sí que es un milagro!
   

Lior Haiat
Portavoz de la Embajada de Israel